Mi aventura en el Yoga empezó en Mallorca al abandonar la empresa donde trabajaba y que no conectaba nada conmigo, solo estaba ahí porque en su momento me dejé influir por voces externas que me convencieron a “probar” ese puesto.
Por mi naturaleza no puedo estar en un trabajo y no hacerlo bien, pero al mismo tiempo, al no sentirme realizada con las funciones que tenía que desempeñar, mi alegría natural, entusiasmo y ganas de vivir una vida plena fueron mermando.
Y trabajaba en un gran laboratorio farmacéutico que todos conocíamos en aquel entonces y hoy aún más por sus famosas vacunas para el virus del covid (Pfizer).
Para mí era un ambiente hostil, no conectado con mis valores, con mucha presión para facturar más y más y de alguna forma banalizar la salud de las personas por intereses económicos.
En aquel momento, después de casi 4 años pude convencerme de que tenía que dejar esa empresa y descansar. Pero mi cuerpo y mi mente ya habían sufrido bastante maltrato y desatención, no habían sido escuchados. Entonces llegó la enfermedad, fui diagnosticada con lupus cutáneo y afortunadamente tratada oportunamente.
Después de un tiempo el Yoga se presentó en mi vida, como una llamada de atención hacia mí misma. No conocía nada de esta disciplina, pero algo me invitó a probar una clase.
Desde el momento uno puede ver todo desde otra perspectiva, disfrutar, conocer más a fondo todas las enseñanzas del Yoga y querer enseguida formar parte aún más activa de esa comunidad. En cuanto pude me formé como instructora de Yoga. Una formación que recibí dos veces, una directamente de mis maestros y otra en un curso ordinario.
Fue entonces cuando tomé la decisión de volver a mi ciudad natal ya que mi madre se encontraba muy enferma. Pude comprobar lo difícil que es que la gente te conozca y hacerse un hueco en mi caso como profesora de Yoga.
Ha sido un proceso duro y largo que además ha tenido una pandemia de por medio, pero después de casi 6 años, mucho esfuerzo y trabajo puedo decir que estoy orgullosa de los resultados.
¿Qué tipo de Yoga se imparte?
El tipo de Yoga que impartimos en Con Alma Yoga Ro Albert es Hatha Yoga. Es la base de cualquier Yoga físico. Se basa en la toma de consciencia respiratoria, así como del cuerpo y de la mente. Así mismo, nos nutrimos de otros estilos de Yoga, incorporando algunos elementos de ellos en algunos momentos, aportan frescura y dinamismo a la práctica, nos asisten en conseguir que la mente esté atenta y concentrada, evitando mecanizar los movimientos y posturas.
¿A quiénes van dirigidas las clases?
En Con Alma Yoga Ro Albert abrimos el abanico de la práctica de Yoga a todas las edades: Pueden venir futuras mamás a Yoga prenatal, mamás/papás con bebés, niñ@s ya solos a partir de 3 años a 6 años en un grupo, y de 7 a 12 años en otro. También hay grupos de adultos y tercera edad. En el caso de Pilates las clases que ofrecemos en estos momentos son para adultos.
¿Cómo puedo inscribirme en las clases?
En Con Alma Yoga Ro Albert abrimos el abanico de la práctica de Yoga a todas las edades: Pueden venir futuras mamás a Yoga prenatal, mamás/papás con bebés, niñ@s ya solos a partir de 3 años a 6 años en un grupo, y de 7 a 12 años en otro. También hay grupos de adultos y tercera edad. En el caso de Pilates las clases que ofrecemos en estos momentos son para adultos.
¿Además de las clases regulares, se realizan otro tipo de actividades y/o servicios?
Aparte de las clases de Pilates y Yoga, ofrecemos masajes Ayurveda, seguro que te gustarán para tí mism@ o para regalar.
También hacemos talleres puntuales de diferente índole, siendo el hilo conductor la consciencia, bienestar y el cuidado personal y del medio ambiente.
¿Qué tipo de productos se pueden adquirir en Con Alma Yoga Ro Albert?
Se pueden adquirir diferentes productos para el bienestar de toda la familia: bebidas frías, complementos nutricionales, infusiones y tés, jabones artesanales, harinas, velas artesanales, incienso, camisetas, sudaderas, tazas, pulseras, etc. desde nuestro centro.
¿Cuales son nuestros extras?
En Con Alma Yoga Ro Albert abrimos el abanico de la práctica de Yoga a todas las edades: Pueden venir futuras mamás a Yoga prenatal, mamás/papás con bebés, niñ@s ya solos a partir de 3 años a 6 años en un grupo, y de 7 a 12 años en otro. También hay grupos de adultos y tercera edad. En el caso de Pilates las clases que ofrecemos en estos momentos son para adultos.
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